La
llegada del primer bebé va a obligar a que tengamos que redecorar la
casa, de arriba a abajo, por lo menos, uno de los cuartos. En los
práctico, va a ser preparar una estancia para ser el lugar donde
vamos a cambiar, vestir, jugar, dormir o alimentar a nuestro bebé,
que está a punto de llegar. Algunos de los consejos que podemos dar,
para que este cambio no sea tan brusco, son los siguientes:
-El
cuarto debe estar cerca del de los padres, para que estos tarden lo
menos posible, ante cualquier urgencia.
-Se
debe organizar todo con suficiente tiempo, para poder evitar agobios
de último momentos, que podrían coincidir con la recta final del
embarazo.
-Las
paredes no deberían ir decoradas en colores, ni muy fuertes ni muy
brillantes, ya que pueden llegar a desasosegar al bebé. Tenemos
muchas posibilidades entre los colores pastel y los colores más
suaves de la paleta.
-No
sólo vamos a tener que pintar, sino que podemos apostar por los
dibujos, los vinilos o cualquier otro elemento decorativo.
-En
caso de que decidamos apostar por cenefas decorativas, hay que tener
en cuenta cuál es la altura del niño pequeño, para no tener
problemas en un futuro, con este punto.
-Recuerda
que a los niños les encanta jugar en el suelo. Lo mejor, es apostar
por suelos de madera o, si podemos, por alfombras o moquetas (pero,
ten en cuenta que, estas, van a atrapar la suciedad y los ácaros).
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