Seguimos con algunas reformas, que no sólo van a ser interesantes para la estética de nuestra casa, si no para nuestra salud, para nuestra calidad de vida:
-Que el aire acondicionado esté bien limpio. Por supuesto, no debes apostar por las temperaturas muy bajas, sino que debes apostar por un mantenimiento regular de nuestro aire acondicionado. Puedes contratar a un profesional, para que limpie bien los conductos y, de esta manera, acabar con la propagación de bacterias, moho u hongos, lo que hará que desaparezcan síntomas como son la irritación de los ojos o de la garganta, o sufrir de malestar general.
-Aísla las ventanas. Esto es básico si buscas ahorrar energía, o sea, ahorrar dinero. Si tienes unas ventanas bien aisladas vas a poder evitar las corrientes de aire, que provocan que nos resfriemos y se va a sumar al resto de beneficios. Si quieres saber si hay corrientes, puedes acercar una vela encendida, a los bordes de la ventana. Si la llama se tambalea, entonces, no hay un aislamiento perfecto.
Foto: fuente
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