El
Feng Sui, o “viento y agua”, es una tradición, de origen chino,
que está basado en el equilibrio en el ambiente y en las energías
invisibles, que nos vamos a poder encontrar en la naturaleza. A la
hora de aplicarlo en la decoración, el Feng Shui debe cumplir una
serie de reglas, que son muy fáciles. Así, nos encontramos con una
ola oriental, que va a enriquecer nuestra decoración occidental.
Así, su principio es el equilibrio. Pues bien, el Feng Shui es una
tradición de China, de origen milenario, que lo que busca es el
equilibrio de las energía, que no están rodeando. Estamos ante un
arte de la disposición del entorno para poder crear un espacio
ideal, que va a favorecer el bienestar, la salud o el éxito. Su
práctica se va a basar, de manera principal, en los conceptos del
Yin y del Yang, las direcciones terrestres y los cinco elementos de
la naturaleza -como son el agua, la madera, la tierra, el fuego y el
metal-. En nuestra casa, el objetivo es poder buscar el equilibrio
para poder encontrar la armonía y poder favorecer el desplazamiento
del qi (que es la energía vital).
Foto:
fuente
No hay comentarios:
Publicar un comentario